LIVE IS BETTER WITH MTB

Primeras pedaladas

Llegados al destino, Higueruelas, nos ponemos en marcha hacia la aventura, el objetivo era claro, subir al Cerro Simó y bajar el cortafuegos para luego tirarse por la senda de El Cartero, a priori, todo claro...

Llevados unos metros de subida, por asfalto todavía, vemos a la izquierda un camión con bicis de descenso, unas 10, más las que ya había por el suelo, a continuación el coche escoba baja con un remolque adaptado para llevar las bicis, la logística era perfecta, a partir de aquí entendí a la perfección en que zona estaba, tengo la imagen grabada...

Subiendo 7 kms...

Nosotros a lo nuestro, primeros comentarios al respecto, desentumeciendo

 piernas y siguiendo el GPS para no equivocarnos. Llegamos a la tierra y por supuesto para arriba, unos 7km de montaña, despacito pero con buena letra, aún éramos capaces de hablar. 

Puestas las protecciones y listos para bajar

Adentrándonos en la montaña se producen las primeras separaciones, no importa, había que subir, cada uno a su ritmo, nos veíamos arriba. Cuesta interminable pero según los que ya la habían realizado dicen que merecía la pena, yo, no tenía ni idea, me fiaba de los expertos en el tema. Últimos kms, últimas pedaladas y por fin, estábamos arriba, cerca de los gigantes de viento, impacta estar tan cerca. Había sido una hora de continuo pedalear hacia arriba, aún faltaba alguno por subir, fotos de rigor, barritas, geles y esperando para hacerle la ola, cuando llegó se lo tomó con humor, nos hizo reir, GRANDE!

En la cima, esperando y reponiendo fuerzas

Continuamos subiendo pero ya más despacio, estábamos a 300 m de hacer otra parada... si otra parada...

Era hora de ponerse las protecciones, en mi caso, unas coderas prestadas por el padrino, otros coderas y rodilleras, otros protector de mandíbula para el casco, al final, todos lo mejor preparados que podíamos, la cosa se ponía tensa, sillines abajo, orden para bajar y .... THERE WE GO!!!!

Cortafuegos

Cortafuegos superado, con algún susto pero dentro de la normalidad, la GO PRO funcionando, inmortalizando el momento, se estrenaba en la canyon. Mucha pendiente, mucha piedra suelta y una senda que no te debes salir de ella, la adrenalina se servía en plato caliente, para esto nos habíamos pegado 7 kms de subida, ahora lo entendía todo.

Llegados a una zona llana, comentamos la siguiente bajada, unos 5 kms más de control, tensión, adrenalina, velocidad, técnica y por supuesto conocimiento, ésta senda, LA DEL CARTERO, nos llevaba al pueblo, rodeada de pinos y vegetación, pintaba perfecto.

1-2-3- y para abajo, los primeros a tope, los demás también, tocaba disfrutar, derrapes, bloqueo de frenos, culo tocando rueda trasera para evitar salir por encima de la bici, algún biker apartado…

Sensaciones durante la bajada, buenas, el dedo meñique se me dormía, los frenos se iban hundiendo debido al sobrecalentamiento, para esto se paga lo bueno, sin duda merece la pena, piernas en tensión, bueno, todo el cuerpo en tensión, activados todos los sentidos y disfrutando del momento. Parada de reagrupamiento y Víctor nos comenta los que nos íbamos a encontrar a partir de ahora, los llamados TOBOGANES, había que dejar ir la bici para poder subir, sino te quedabas a mitad. Fue divertido.

Al final parada y comentarios, ya estábamos abajo, todos, risas y comentarios al respecto, en las caras se veía el buena ambiente, tocaba almorzar. Seguimos por unas sendas, que ya eran coser y cantar después de lo realizado.

4 bicis en la furgoneta de Víctor, madre!!!

En el bar, almuerzo completito, cacaos, aceitunas, bocadillos, ajoaceite, mahonesa, bebidas, cafés…. Después, unos a casa y otros…. VUELTA A SUBIR!!!! Queríamos más!! Más de lo mismo pero mejor, ya sabíamos donde íbamos y a que nos enfrentábamos. Se nos acercó un chico (en la subida iba a 15 por hora, se unió a nosotros que íbamos un poco más despacio, pero sólo un poco... jeje) que hacía unos 25000 kms al año, sus piernas lo demostraban. Por lo demás, el cansancio se notaba al bajar, mayor descoordinación. Al final una caída sin consecuencias de uno de los bikers. Vuelta al pueblo y camino a casa.

Gran mañana de BTT y otra más que contar, sencillamente, espectacular.